Alsacia (Francia)
Alsacia es reconocida por sus vinos y sus preciosos pueblos. Riquewihr, en particular, guarda un asombroso parecido con el pueblo de «La Bella y la Bestia». Los pintorescos escenarios de esta región inspiraron a los animadores en la versión animada de 1991 y en la reciente adaptación con Emma Watson como protagonista. La magia de Alsacia trasciende la pantalla y cobra vida en sus callejones adoquinados y arquitectura encantadora.
Parque Nacional de Amboseli (Kenia)
El Parque Nacional de Amboseli es un vasto santuario de vida salvaje, enmarcado por la majestuosidad del monte Kilimanjaro. Con vistas impresionantes de la montaña más alta del mundo, esta reserva natural ha sido un tesoro de inspiración para la película «El Rey León». Aunque varias regiones africanas influyeron en el paisaje de la película, el icónico monte Kilimanjaro se revela claramente en los primeros fotogramas, agregando su grandeza a la historia animada.
Bosque de Ashdown (Inglaterra)
El Bosque de Ashdown inspiró a A.A. Milne, el escritor británico, quien basó la serie «Winnie the Pooh» en las aventuras de su hijo Christopher Robin en este encantador entorno de East Sussex. Los relatos sobre las travesías de Christopher Robin y sus adorables amigos en el Bosque de los Cien Acres dieron vida a libros icónicos, y a lo largo del tiempo, estas historias han sido adaptadas en varias películas, perdurando en el corazón de generaciones.
Bora Bora (Polinesia Francesa)
Bora Bora es un paraíso tropical con aguas turquesas y exuberantes islas. La película de Disney «Moana» tomó inspiración de este asombroso lugar para crear su cautivador escenario. Las islas y la belleza natural de Bora Bora se han inmortalizado en la imaginación a través de la magia del cine.
Castillo de Chillon (Suiza)
Situado a orillas del lago Lemán, el Castillo de Chillon ha sido vinculado como inspiración para el castillo del príncipe Eric en «La Sirenita». A pesar de encontrarse junto a un lago en lugar del mar, la atmósfera del castillo evoca fácilmente la imagen de Ariel emergiendo del agua, añadiendo un encanto mágico a su entorno.
Castillo de Eilean Donan (Escocia)
Ubicado en Escocia, el Castillo de Eilean Donan ha sido escenario de notables producciones, incluyendo «Highlander» y una película de James Bond. Recientemente, se ha relacionado con el diseño del castillo DunBroch de la película de Disney «Brave: Indomable», agregando a su historia una pincelada de magia cinematográfica.
Bahía de Ha Long (Vietnam)
La Bahía de Ha Long, con su costa que a veces se ve envuelta en niebla misteriosa, sirvió como escenario ideal para la película «Kong: La Isla Calavera», la última entrega de King Kong. Este impresionante paisaje aportó una atmósfera única a la película, resaltando la majestuosidad y el misterio de la isla.
Livraria Lello (Portugal)
La Livraria Lello, en la bella ciudad portuguesa de Oporto, es una joya histórica que se dice inspiró a J.K. Rowling para crear el universo de Harry Potter. Aunque Rowling vivió en Oporto durante dos años, afirma nunca haber visitado la librería. Aun así, la librería Flourish and Blotts en la serie de películas de Harry Potter comparte una estética sorprendentemente similar. ¿Coincidencia o fuente de inspiración secreta?
Castillo de Lohr (Alemania)
El Castillo de Lohr se postula como la inspiración detrás de la historia de Blancanieves, originalmente un cuento de los hermanos Grimm. Las investigaciones modernas sugieren que esta narrativa podría tener raíces en hechos reales que tuvieron lugar en las cercanías de este pintoresco castillo. La conexión histórica entre este lugar y el popular cuento de hadas añade un fascinante matiz de realidad a la leyenda de Blancanieves.
Mont-Saint Michel (Francia)
Le Mont-Saint Michel es una asombrosa ciudad amurallada en una isla mareal al norte de Francia, y es, sin duda, un verdadero espectáculo. Su castillo coronando la colina ha sido la inspiración para la torre de Rapunzel en la película «Enredados», añadiendo un toque de magia a esta joya arquitectónica.
Castillo de Neuschwanstein (Alemania)
El Castillo de Neuschwanstein es una maravilla arquitectónica que evoca la magia de los cuentos de hadas. Erigido en 1869 por Luis II de Baviera, llamado el Rey Loco, con la ayuda de un escenógrafo, cautiva con su encanto inquietante. Walt Disney, al verlo en un viaje a Baviera con su esposa, encontró inspiración para sus películas. No es de extrañar que recuerde al castillo de «La Bella Durmiente» y haya influido en el icónico castillo de «Cenicienta».
Bosque de Spessart (Alemania)
El Bosque de Spessart, que rodea al Castillo de Lohr, es el posible escenario en el cual «Blancanieves» buscó refugio de su malvada madrastra. La leyenda sugiere que los enanos y el ataúd de cristal con los que se relaciona en el cuento podrían tener raíces históricas. En consecuencia, la inspiración para la película de Disney tiene una profundidad más sombría de lo que aparenta, revelando un matiz intrigante en la narrativa clásica de Blancanieves.
Taj Mahal (India)
El Taj Mahal en la India, una de las obras maestras arquitectónicas más renombradas del mundo, ha cautivado a creativos a lo largo de la historia. Walt Disney también halló inspiración en este icónico monumento, ya que el palacio de la película «Aladino» toma sus referencias del inigualable Taj Mahal. Su belleza trasciende culturas y fronteras, dejando una huella eterna en la imaginación.
La Ciudad Prohibida (China)
La majestuosa Ciudad Prohibida de Pekín, construida en 1420, se mantiene como el palacio imperial más grande y preservado del planeta. El palacio del Emperador en la película «Mulán» está inspirado en esta imponente estructura histórica, llevando consigo la grandeza y la historia de la verdadera Ciudad Prohibida de China a la pantalla de cine.
